“Sembrador a la puesta de sol” de Vincent Van Gogh.

“El sembrador a la puesta de sol”, obra de Vincent van Gogh, de 1888, con unas dimensiones de 32 x 40cm, en Museo Van Gogh, Ámsterdam – Países Bajos.
Escucha Nocturne op. 9 No. 2 mientras lees.
Van Gogh comenzó a pintar en 1880 después de muchos años de hacer dibujos en carboncillo. De hecho, no fue hasta 1888 que dejó de esbozar cada cuadro con un dibujo al carbón primero. Su formación en el dibujo hizo que muchos de sus primeros cuadros se determinaran en base a un patrón específico que se iniciaba con una “c” que dibujaba en algún lugar del centro del lienzo.
Entonces, él dibujaba líneas verticales con colores cálidos como el amarillo alrededor de la “c”, seguidas por líneas verticales fuera del centro con colores fríos como el azul, escenas que nos recuerden a Millet, tan estimado por el holandés en su juventud. La figura del sembrador casi se inserta entre los tonos de la tierra mientras al fondo un resplandeciente y amarillento sol preside la composición.
El uso de Van Gogh del color representaba la emoción de una escena desde su perspectiva. Una gama de tonos anaranjados a su alrededor, motivando la aparición de sombras coloreadas – en tonos azules y malvas – que recuerdan al Impresionismo. La pincelada es muy suelta, trabajando con rapidez, apreciándose la textura del óleo claramente, lo que provoca un mayor acercamiento hacia el espectador. En la zona del sol emplea una serie de trazos radiales al círculo plano para obtener mayor luminosidad.
El día de hoy se encuentra en nuestra fotografía de portada de arteindie.com, la imagen expresa un sol muy radiante como el que podemos ver los que estamos cerca de la línea del Ecuador, es bueno que prestemos atención a la historia de cada obra para que conozcamos, porque si conocemos tenemos de qué hablar.
Fuente: elpoderdelarte1